sábado, 12 de diciembre de 2009

Dragones de Komodo no vuelan pero tampoco les hace falta...

27 horas me costó llegar desde Mataram (Lombok) a Labuanbajo (Flores). 27 interminables, incómodas y sufridas horas.

Compré un ticket por 290000 rupias, unos 20€, que incluía 2 trayectos en autobús y 2 ferrys. Empecé mal el viaje, siendo engañado por uno de los operarios de la central de autobuses, que aseguraba que tenía que pagar 50000 más por el equipaje. Luego me enteré que era mentira, pero el maldito ya había desaparecido del mapa. Además, el mamón me había cambiado de autobús y sentado en el peor sitio, en el asiento 39, al final. Es un sitio cómodo porque puedes estirar los pies y el aire acondicionado del autobús, aunque no te da directamente, te mantiene fresco. El problema es que estos autobuses tienen una amortiguación exagerada, dado el deplorable estado de algunas carreteras, llenas de baches, y me pasé las primeras 4 horas del viaje saltando en el asiento. Menos mal que apenas había comido y mi estómago no se resintió demasiado.

De Mataram a Selat creo que fueron unas 4 horas. De ahí cogimos un ferry que nos llevó a Alas, en la isla de Sumbawa, y en el mismo autobús y en el mismo asiento, recorrimos durante no sé cuantas horas, unas 10, la enorme isla hasta llegar a Sape. Durante este trayecto cometí el fatal error de darle mi tiket al tipo del restaurante,ne paramos a cenar, pues mi ticket era un uete completo que incluía otro autobús y otro ferry más, que tube que pagar al no poder mostrar el ticket....

En fin, la cuestión es que 27 horas después llegué a Labuan Bajo, en Flores. Flores heredó su nombre bajo dominación portuguesa, y aún se nota su influencia pues la mayor parte de sus habitante son católicos. Es en esta isla donde se encuentra el cráter multicónico de Kelimutu, aunque en principio creo que paso de más trekking, y desde donde salen los botes para visitar Komodo y Rinca, con sus famosos dragones. Durante el trayecto del último ferry se observan decenas de islas, miles de playas solitarias, manglares y delfines saltando. Aún así, las vistas no ayudan a mejorar el pésimo trayecto que supone pasar 9 horas metido en un barco con asientos incómodos, sin un sitio donde tumbarte más que en el suelo o unas tablas de madera, y la música de karaoke a todas horas en las teles. Menos mal que el libro con el que estoy ahora me tiene enganchado...

Aquí unas vistas del paseo en barco.



Me busqué una habitación, en una pensión bastante lamentable, ya que dado el gasto de los últimos días, he decidido ahorrar todo lo posible. Pago 60000 rupias la noche, unos 4,20€, y bueno, por ese precio ya se sabe lo que hay: un baño al estilo indonesio con un cazo con agua como ducha y una cama con la mosquitera medio rasgada, ranas en los baños de las habitaciones libres que croan toda la noche y arañas y otros animales como compañeros de habitación...

Esta es la suitte:



Labuan Bajo es un humilde pueblo pesquero con unas bonitas playas cerca y unas excepcionales zonas de submarinismo.´Panorámica del pueblo:


Después de pillar habitación, lo primero era ver cómo hacía para abaratar el coste de visitar Komodo o Rinca, donde se encuentran los famosos Dragones de Komodo, una especie de lagartos de hasta 3 metros...creo que todos hemos oído hablar de ellos. Carnívoros y hasta canívales, matan a sus enemigos inoculándoles unas vacterias tras morderlos que los debilitan hasta la muerte. Un búfalo cazado por ellos puede tardar hasta 2 semanas en morir, tiempo que pasa el dragón persiguiéndolo hasta darse el festín. Aunque son animales de sangre fría y por tanto, bastante inactivos en tierra, no hay que provocarlos, pues corren bastante rápido si se lo proponen y su cola puede tumbar a un hombre adulto.

Me acerqué a otro hostel, el hotel "Bajo" para comprar precios, y aunque no me pillé una habitación, el tipo me dijo que por 400000 me llevaba a Rinca a pasar el día, y luego a algunos lugares para hacer buceo. Ese dinero se divide entre tantas personas como vayan. Tube la suerte de conocer pronto a un italiano y su pareja australiana, y juntos contratamos el tema. Así que por 115000 (un descuento pues ellos se quedaban en el hostal) tenía el plan para el día siguiente de ir a ver los famosos dragones.

Y allí que fuimos. A las 7 y cuarto nos montamos en el bote que nos llevaría a Rinca, a 2 horas de distancia. Por el camino, más delfines, peces voladores y muchas islas paradisíacas.





Rinca tiene un minúsculo muelle y una sola cafetería-bar donde depende a la hora que vayas te darán las bebidas frías o calientes, pues encienden el motor por la tarde. Nada más llega y pagar los 190000 de la entrada al parque (bastante caro) y 20000 más por el guía y una marcha de 2 horas, vimos los primeros dragones. Estaban olgazaneando debajo de una de las casas (puedes quedarte a dormir en la isla por 150000 la noche). Según el guía, vienen ahí atraídos por el olor de la comida y porque durante el día prefieren esconderse bajo la sombra.



No te debes acercar a menos de 3 ó 4 metros según el guía, pues pueden sentirse amenazados y atacar. Para que no fuéramos muy valientes, nos confirmó la historia que había oído hace tiempo, la de que un suizo se perdió en la isla y al cabo de unos días encontraron su cuerpo devorado por estas bestias... El bicho impresiona, aunque si no tiene necesidad se mueve muy lentamente, si es que lo hace.

Para el paseo, seguí el ejemplo del guía y me agencié un palo bien largo, por si las moscas. Hacía un calor de mil demonios, pero eso era bueno: me aseguraba que los dragones estarían medio dormidos a la sombra y sin ganas de bronca.

Pronto empezamos a ver los animales que suelen servir de almuerzo para el dragón: monos, búfalos, ciervos, cerdos salvajes, turkeis (que no sé como se dice en español pero es como un pavo real pero sin plumas), etc... Me extrañó ver a los búfalos tan tranquilos en las charcas con dragones a su alrededor. Presa y cazador tomando la sombra juntos? Se llevan bien, siempre que el dragón no tenga hambre, cosa que pasa cada 3 meses más o menos. Sabes cuando un dragón ha comido porque se le hincha la cola. Supongo que el búfalo también tiene esa información...

Aquí vemos a un búfalo mosqueado por nuestra presencia y un dragón en primer plano esperando a que le entre hambre...


También fuimos afortunados, pues algunas hembras acababan de poner los huevos en varios nichos. Defienden la guarida durante 3 meses, aunque la gestación de los nuevos lagartos dura entre 8 y 9 meses. Durante ese tiempo, mejor mantente lejos porque la madre no dudará en atacar si ve amenazados a su vástagos. Aquí la madre mosqueada, y el nicho un poco más adelante y a su izquierda:



Después de sudar bajo el incansable sol indonesio sólo pensaba en un baño, cosa que hicimos pronto. Paramos en un par de islitas con las gafas, tubo y aletas cargadas y listas. Acojonante la vida marina que puede haber en unos pocos metros de costa. Por primera vez he visto una auténtica JUNGLA coralina. Metros y metros y metros de coral de todos los colores posibles, por supuesto acompañados por miles de especies de peces, sin espacio para arena u otra cosa que no sea más coral. Lástima que no tenga una cámara acuática, pero se parece bastante a esto...

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